Caronte (pintura al fresco romana) |
Hoy, 11 de mayo, sería el segundo día de las Lemurias para nuestros antepasados romanos.
Días y noches en las que los espíritus deambulaban por las dos orillas de la laguna Estigia, ni en este mundo, ni en el otro. Días en los que los supersticiosos temían todo tipo de infortunios propiciados por los espíritus díscolos o vengativos y no se arriesgaban casi ni a salir de sus casas. Los no supersticiosos tampoco asumían riesgos,... por si acaso.
Días para meditar sobre el sentido de la vida, para recordar a los que se fueron y para ir preparándose para la cita inevitable con Caronte, el barquero que conduce las almas. Y noches para conjurar espíritus dañinos y contar historias de fantasmas.
Si os gustan las historias de fantasmas, almas en pena y aparecidos, aquí está el enlace a la siguiente entrega de la historia que empezamos a recordar ayer.
"Noche de fantasmas"
https://teresapiquetescritora.blogspot.com/2016/05/noche-de-fantasmas.html
Nota aclaratoria
Para un lector que nos consulta: las Lemurias empezaban en las nonas de mayo (día 9) y se celebraban en días alternos (11 y 13), antes de los idus (día 15). Los días de Lemurias se consideraban "nefastos", o sea, inhábiles por motivos religiosos para muchas cosas. El que nuestros antepasados romanos consideraran que traía mala suerte hacer determinadas cosas en los días "nefastos" del calendario, acabó determinando el sentido negativo de la palabra "nefasto" sigue teniendo en español.